Aunque lo veamos cotidianamente muy pocos reparamos en el hecho de que un día nublado destruye las sombras de los objetos. Lo hemos interiorizado tanto que ni lo percibimos. Pero ¿por qué? Este es el nuevo desafío para el alumnado de 2º de ESO. Pista: la sombra no desaparece debajo de los coches.

¡Adelante, chic@s!