Hay nubarrones sobre el Centro de Ciencia Principia. Sin entrar en el núcleo del problema, no es nuestra competencia, queremos dejar constancia de nuestra constante colaboración con ellos. Cada año enviamos grupos al Centro y, desde hace ya muchas ediciones, han participado en nuestros Encuentros de Ciencias. En la foto tenemos a Carlos Durán y Manolo Fernández en la inauguración de la última edición, consiguiendo, como siempre, la atención y a menudo las sonrisas del público. Algunos de los profesores de nuestro Club participaron en la gestación de esta hermosa iniciativa junto al muy recordado Tomás Hormigo, allá por 1993, cuando se organizó una exposición en el Parque Tecnológico que fue el embrión de la Asociación MECYT (Museo Escolar de Ciencia y Tecnología), que a su vez fundó el Centro. La palabra escolar en el último acrónimo es la seña de identidad del Centro Principia, que se ha centrado en la ciencia base, en la promoción de la ciencia en los primeros escalones, allí donde lo que se hace no es vistoso, ni genera prestigio, ni siquiera atención mediática. La ciencia base, como su propio nombre indica, es el sustento del resto del edificio. Sin la labor callada, y apasionadamente a contracorriente, de toda la institución la ciencia de primera división en Málaga no sería la misma. Difícil de cuantificar, pero estamos seguros que han sido muchos nuestros alumnos y alumnas que han cristalizado su interés por la ciencia en contacto con sus divulgadores y sus creaciones en forma de módulos interactivos. Una inversión modesta, lejos de la grandielocuencia desplegada por otros Museos de la Ciencia, pero muy rentable considerando el principal objetivo: la promoción de la cultura científica y el estímulo para conseguir más vocaciones en este ámbito. Con el carpetovetónico “¡Que inventen ellos!” como cimiento cultural, el Centro Principia forma parte de ese intento de normalizar y estimular la cultura científica en nuestro país, de una cultura que hoy sabemos es imprescindible para el progreso de nuestra sociedad.

Sólo deseamos que esas nubes oscuras se despejen por quien corresponda y a quien corresponda le rogamos que evite la inmensa estupidez que sería cerrarlo, si acaso lo normal e inteligente, dado que ya ha demostrado con creces su utilidad y eficiencia, sería ampliarlo y dotarlo de mayor presupuesto y personal. Por si quieres adherirte a la iniciativa que en Change.org se ha iniciado expresando estas ideas sólo tienes que hacer clic sobre el siguiente enlace. En este momento ya se han recogido casi 15000 firmas, ¡cuántas más mejor!

¡Un abrazo a nuestros compañer@s de Principia y muchas gracias por tantos años de un gran trabajo!