Venus, la última luz de la noche, el telonero del portentoso Sol ha querido esta madrugada interponerse entre la estrella y nuestro planeta. Ese tímido puntito que pasa de puntillas por el disco inflamado del astro rey es todo un mundo, inhóspito pero mundo al fin al cabo. Lo mostramos en fotografía y vídeo (retransmisión de la NASA).